Número 36, Marzo 30 de 2003

Daños en Vietnam, Kosovo, el Pérsico

Proyectiles de Uranio empobrecido

En los 90s, la OTAN utilizó contra el pueblo de Bosnia-Herzegovina proyectiles de uranio empobrecido. Hoy, todavía contaminan el aire y el agua. Los bárbaros que invaden Irak amenazan con mayores daños a este país. ¡Todos a detener el genocidio y la masacre!

A ese uranio le llaman empobrecido porque ha sido previamente procesado y el contenido de uranio (235) es bajo (pobre). Eso no le quita ningún riesgo, porque siendo “muy poquito” sigue siendo radiativo. Cada proyectil contiene 275 gramos de uranio empobrecido. No es poca cantidad y se trata de los isótopos Uranio 238 y Uranio 235.

Según la inútil ONU no hay razón para alarmarse. Los generales angloamericanos de la guerra minimizan el riesgo. Eso lo dicen tratándose de las tropas agresoras, de las agredidas ni hablan.

El uranio empobrecido es un material que se usa como blindaje y como proyectil es ideal para disparar contra edificios o vehículos blindados, como tanques de guerra. Para éstos propósitos el uranio se manufactura en forma de una aleación metálica, pero jamás pierde sus propiedades. El uranio es un material radiativo por naturaleza que emite radiaciones ionizantes y, a su vez, se desintegra en una cadena de otros elementos asimismo radiativos.

La radiación alfa (α) es de las más peligrosas cuando se incorpora al organismo, porque es altamente energética (5 Mev) y recorre distancias muy cortas (micras). Esto quiere decir, que deposita toda su energía en el tejido vivo destruyéndolo. En el campo de batalla, y en cualquier parte, SÍ hay problema sobretodo en las ciudades, pero también en el campo, ríos y lagos.

Los militares gringos les recomiendan a sus soldados que usen ropa de protección. Eso no sirve de nada. El problema NO es la irradiación externa sino la interna que puede afectar a los soldados y a la población en general.

Cuando un proyectil de uranio explota, deja residuos de polvo que contienen material radiactivo. Este polvo de uranio, sea empobrecido o no, es incorporado en el ambiente contaminando a los materiales, al agua, el aire y a las personas. En este caso, se trata de contaminación interna producida por la incorporación al organismo de esas minúsculas partículas de polvo. La incorporación puede ser vía la respiración, la ingestión (alimentos, agua) o la adsorción de la piel (heridas). Para descontaminar a una persona que ha incorporado uranio debe haber tratamiento especial y, aún así, resulta sumamente difícil.

El problema reside en que el uranio afecta a órganos como el pulmón, de donde es muy difícil extraerlo. Por otra parte, la eliminación biológica vía el riñón es poco efectiva. Resulta que el uranio, empobrecido o no, tiene una vida media de 4 mil 500 millones de años, es decir, se necesita de un período de ese tamaño para que la cantidad de material radiativo se reduzca a la mitad. Harían falta, por tanto, muchas vidas para eliminar la presencia nociva del uranio, empobrecido o no.

Mientras el uranio está dentro del organismo se está desintegrando, es decir, produciendo otros elementos radiativos muchos de éstos emisores alfa. Durante ese tiempo, se produce un bombardeo de millones de radiaciones por segundo que destruyen a cualquier tejido vivo.

Los efectos biológicos que se presentan en las personas directamente contaminadas son diversos, principalmente cáncer. Además, se tiene el riesgo de los efectos genéticos, esos efectos azarosos de naturaleza probabilística que se presentan en las siguientes generaciones. Con ello se pone en riesgo al patrimonio genético de la humanidad.

La ONU encontró contaminación en Bosnia-Herzegovina causada por armas utilizadas en 1994 y 1995. Pero no debe haber alarma, dicen sus voceros.

El imperialismo carece de ética. Así como utilizó proyectiles de uranio empobrecido en la guerra de Bosnia-Herzegovina, podría estar utilizándolos en Irak. El FTE de México no tiene ninguna duda. Así como se han arrojado miles de bombas dirigidas por satélite y aviones no tripulados, seguramente ya se utilizan proyectiles radiativos. Si los invasores no lo han hecho lo harán. Quienes dirigen esa barbarie han dicho que utilizarán armas para “reventar” bunkers. Se refieren a los proyectiles de uranio. Se trata de armamento NO convencional sumamente peligroso para la salud de las personas y la conservación del medio ambiente.

Todo el mundo, organizado y en lucha, debemos detener al genocidio y la masacre.

Helicóptero derribado por los combatientes de Irak

El imperialismo podrá disponer de las armas más sofisticadas e, incluso, utilizarlas.
¡Pero no podrá ganar la guerra!
El pueblo de Irak y los demás pueblos en lucha detendremos la barbarie.